LA HACHE (esa traviesa)
La
hache es la letra más traviesa del alfabeto. Aprovechando su calidad
de muda, cree que puede pasar desapercibida escondiéndose. Ignora
que muchos nos damos cuenta de su ausencia y exigimos que, aunque en
silencio, permanezca donde debe estar. Otras veces, también porque
sabe que no hace ruido, se ubica donde no debe, esa travesura se la
hacía a
mi madre. Ella sabía que adolecía de ignorarla y por eso la
convocaba para que se ubicara siempre, aún en lugares inadecuados, y
la hache, que, como digo, es tan traviesa, se burlaba de mi madre
llenando sus escritos con descaro.